De acuerdo con un reciente informe de la consultora privada Desarrollo del sector de Negocios Internacionales (DNI), desde que la presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, tomó su primer mandato en 2007, las relaciones comerciales entre su país e Irán han batido un nuevo récord histórico, al alcanzar más de 1500 millones de dólares.
Después de más de una década de que las relaciones de los dos países, tras el suceso de AMIA, se habían congelado, ahora Irán ya es el segundo importador de aceite de soja argentino seguido de La India.
Asimismo, Argentina exportó entre septiembre y octubre de 2012, 30 mil toneladas de arroz de buena calidad a Irán.
El Gobierno de Cristina Fernández ha respondido a las críticas del régimen de Israel y sus aliados occidentales que observan con cierto nerviosismo el acercamiento económico y político entre los dos países.
El ministro de Asuntos Exteriores de Argentina, Héctor Timerman, escribió en su cuenta oficial de Twitter que el repunte de los lazos comerciales responde a la decisión soberana del Gobierno de Irán para importar productos argentinos. “Nunca vamos a permitir que la tragedia AMIA sea utilizada como una pieza de ajedrez en el tablero de los intereses geopolíticos extranjeros”, anotó.
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